MAHLE y Siemens se lanzan a la carga inductiva para coches eléctricos

El reto de MAHLE y Siemens, cargadores inductivos a gran escala para coches eléctricosMAHLE / Siemens

Los cargadores eléctricos son el gran problema de la Unión Europa y de los países miembros para poder dar cumplimiento a la transformación de la movilidad de la próxima década. Un componente esencial para los conductores y para las empresas. MAHLE y Siemens se han asociado para el desarrollo e implantación de la carga inductiva en masa.

La jugada no le salió nada bien a BMW cuando lanzó una plataforma de carga inductiva para los propietarios de sus modelos híbridos enchufables. La marca bávara buscaba adelantarse a una competencia que nunca buscó esa forma para recargar sus modelos PHEV, apostando por los más sencillos y baratos cargadores eléctricos de pared. La idea de los bávaros buscaba la comodidad de los clientes, pero a un precio desmesurado.

Hoy, la tendencia en la recarga de los coches eléctricos sigue la misma línea, con una red de cargadores eléctricos en forma de las clásicas columnas de las que parten las mangueras que se conectan a los coches, como si de surtidores de combustibles se tratase. Sin embargo, MAHLE y Siemens, comprometidos con las soluciones de carga para coches eléctricos y con la transformación de la movilidad más sostenible, han firmado un acuerdo de cooperación para la investigación, desarrollo y producción de sistemas de carga inductiva.

MAHLE y Siemens promocionarán la carga inductiva para coches eléctricos entre las marcas

La carga inductiva en los coches eléctricos, la solución más sencilla

Las dos grandes empresas alemanas apuestan por esta solución más inteligente de carga, mucho más cómoda para el conductor que solamente tendrá que posicionar el vehículo de frente sobre una plataforma específica instalada en el suelo. Una opción ideal más para grandes empresas y aparcamientos que par aun uso doméstico, a pesar de que las dos empresas lo que buscan también es popularizar este sistema e integrarlo en la vida cotidiana. Y es que una de las grandes ventajas es que el conductor no tendrá que estar pendiente de cables y conectores.

Los dos socios están convencidos de que la carga inalámbrica para eléctricos facilita considerablemente la movilidad diaria pero también anima a los interesados en los modelos de cero emisiones a dar el salto. Fuentes de Siemens apuntan que «la eficiencia de transferencia de la carga inductiva inalámbrica es comparable a la de los sistemas enchufables», inmediata y rápida, reduciendo los tiempos de carga. Lo cierto es que el objetivo es también estandarizar este sistema entre los fabricantes, compatible con todos los eléctricos del mercado.

MAHLE y Siemens también colaboran en otro gran proyecto piloto, que se encuentra en pruebas reales. Se llama «chargeBIG», y se trata de un sistema de gestión de carga inteligente que se puede integrar en la actual infraestructura de carga mediante cable sin realizar grandes inversiones ni transformaciones, pero enfocado a los aparcamientos donde algunos vehículos se encuentran estacionados durante períodos de tiempo prolongados, como los de los aeropuertos.

Fuente de éste artículo: Motor.es

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