La marca alemana del coche del pueblo ha decidido actualizar uno de sus productos más exitosos en la actualidad. No es el Golf ni el Tiguan, sino el Volkswagen T-Cross. Este crossover urbano, que a decir verdad también es bastante espacioso, es ya una de las piezas claves de Volkswagen en el mercado europeo.
Es cierto que han hecho modificaciones en el vehículo, pero también es verdad que prácticamente hay que sacar la lupa para encontrar las diferencias. Han seguido aquella lógica que dice “si algo funciona, no lo toques demasiado”. Y es que, 1,2 millones de unidades en cuatro años abalan al Volkswagen T-Cross.
Comenzando por la estética, el primer cambio tiene que ver con las pinturas disponibles. El amarillo sólido que vemos en las imágenes se denomina Grape Yellow, pero no es el único color nuevo, también están los Clear Blue y Kings Red, ambos metalizados. Mientras tanto, se estrenan nuevos estilos de llantas, disponibles en 16 y 17 pulgadas.
Respecto al diseño en sí, encontramos cambios en el frontal y en la trasera, especialmente en las ópticas, con faros y pilotos de LED. Opcionalmente se pueden instalar los LED IQ. Light matriciales, que antes no estaban disponibles en este Volkswagen T-Cross y que ahora se comunican en la parte delantera gracias a una línea iluminada, algo a lo que VW está recurriendo mucho últimamente.
Por su parte, en el habitáculo es novedad que, de serie, viene con un cuadro de instrumentos digital, de 8 pulgadas en las variantes más sencillas y de 10 en las superiores. En el centro del salpicadero que, por cierto, también se ha revisado, aparece una pantalla táctil de 9,2 pulgadas para las versiones tope de gama.
Del mismo modo, de serie viene con aire acondicionado tradicional, pasando a un climatizador automático en los más equipados. Por desgracia, en este último caso el manejo es mediante botones táctiles, que como decimos siempre no es precisamente una solución ideal por las distracciones que pueda provocar.
No hay cambios en el apartado de espacio, donde el VW T-Cross destaca positivamente por contar con un interior bastante amplio. Lo mismo ocurre con el maletero, cuya capacidad se mantiene inalterada con un máximo de 455 litros si deslizamos la banqueta posterior hacia su posición más adelantada, quedando en 385 litros en la más retrasada.
El Volkswagen T-Cross restyling 2024 empezará a entregarse a los clientes a principios del 2024, en el primer trimestre. La firma alemana no ha detallado las mecánicas, habiéndose limitado a decir que estará disponible con “los conocidos y eficientes motores TSI de Volkswagen”.
Es de esperar que se ofrezca con el 1.0 TSI de 110 y el 1.5 TSI de 150 CV. La lógica nos hace pensar que también se podrá configurar con variantes microhíbridas, aunque la marca no lo ha confirmado ni desmentido.
Fuente – Volkswagen
Fuente de éste artículo: Lanzamientos – Actualidad Motor
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