El Opel Crossland fue una de las grandes sorpresas de la casa de Rüsselsheim. Como bien sabes fue uno de los primeros modelos que lanzaron al mercado nada más pasar a manos del Groupe PSA. De hecho, su diseño y la puesta a punto de gran parte de su técnica tuvo lugar antes de que se hiciera oficial su paso de GM a PSA. Gracias al desarrollo del Citroën C3 AirCross pudieron ahorrar costes y, de paso, entrar en un segmento en alza como el B-SUV.
Sea como fuere el Opel Crossland ha evolucionado perdiendo el apellido X que tuvo en su debut inicial. Ahora es la prueba de que un B-SUV puede ser atrevido a la par que elegante y sobrio. Sin embargo, la evolución del segmento y sus rivales obliga a la marca a pensar en un sustituto que está cada vez más cerca. Y gracias a ello algunos detalles de su técnica y posible ubicación en la gama se han filtrado ayudándonos a saber cómo será su evolución.
Como ya hemos indicado más arriba, el actual Crossland comparte un importante número de componente con el C3 AirCross. Pues bien, en su segunda generación las sinergias se mantendrán ya que uno y otro se fabricarán partiendo de una evolución de la plataforma CMP de PSA. Gracias a ella habrá un ligero crecimiento de cotas pasando a medir en torno a los 4,3 metros para así ubicarse entre el actual Mokka y la próxima generación del Grandland.
Otro de los apartados que cambiará sustancialmente será el del diseño. Partiendo del Experimental Concept que vio la luz hace unas semanas, tendremos un frontal totalmente renovado con la última evolución del lenguaje Vizor así como unas ópticas más rasgadas. Además, si los rumores se cumplen, no debería faltar en la gama un look de corte off road. Este, en teoría, debería servir de base para rescatar la denominación comercial Frontera.
La posible vuelta del Frontera es uno de los rumores que cada vez cobran más fuerza. Si haces un poco de memoria ya te hablamos de esta posibilidad y, en parte, podría tener lógica. Según varias fuentes la plataforma de esta nueva generación es más flexible y gracias a ello contará con diversas versiones mecánicas. Así el proyecto OV24 tendrá un motor 1.2 PureTech Mild Hybrid de 136 CV con red eléctrica secundaria de 48 voltios.
Para su gestión la marca bávara confiará en la transmisión automática e-DCS6 de doble embrague. Además, también podría llegar al mercado una segunda versión 1.2 PureTech 100% térmico con 136 CV de potencia y cambio manual. Hasta aquí todo bien pero sería la versión cien por cien eléctrica la que daría paso al resucitado Frontera. En efecto, este nombre serviría para distanciarse del Crossland y ofrecer así un producto «más de nicho».
Al parecer, la versión eléctrica contará con un tren motriz de 156 CV de potencia y autonomía superior a los 400 kilómetros. Este sistema es el mismo que ya usan varios modelos de Stellantis pero, además, también podría llegar una versión «básica» de 136 CV o lo que es igual, el mismo sistema del Corsa-e. Sea como fuere, si todos los rumores se cumplen, la nueva generación del Opel Crossland marcará un nuevo punto de inflexión para la marca…
Ya se verá…
Fuente – L´argus
Fuente de éste artículo: Eléctricos – Actualidad Motor
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